El IAE es un tributo que grava a autónomos y personas jurídicas por su actividad empresarial, profesional o artística en el territorio español. Aunque todos están obligados a darse de alta en este impuesto, no siempre tienen que pagarlo. Existen excepciones que liberan a muchas pequeñas empresas de esta carga tributaria.
Además, es importante conocer el epígrafe correspondiente a nuestra actividad, así como la forma de tributación, ya que de ello dependerán nuestras obligaciones fiscales. En este artículo, profundizaremos en los detalles del IAE, sus características y cómo calcular la cantidad a pagar.
El IAE o Impuesto de Actividades Económicas es un impuesto directo que grava a autónomos y personas jurídicas por la actividad empresarial, profesional o artística que realizan dentro del territorio español.
Esto significa que se debe pagar un impuesto fijo que no varía en función de los beneficios obtenidos, y que depende de la actividad realizada.
Es obligatorio darse de alta en el IAE correspondiente en la Agencia Tributaria al comenzar una actividad comercial.
La inscripción en el IAE es obligatoria para todos, pero no todos tendrán que pagar. Existen dos excepciones que eximen a muchos de este impuesto:
Teniendo en cuenta estos requisitos, muchas pequeñas empresas no están obligadas a pagar este impuesto ya que no alcanzan el umbral mínimo de facturación.
Dependiendo de la actividad que realices, tendrás que darte de alta en un IAE específico. Para saber cuál es el adecuado, es necesario consultar el listado de epígrafes de la Agencia Tributaria y buscar el correspondiente. Encontrarás un número que deberás indicar en el modelo 036 al darte de alta como persona jurídica en Hacienda.
Los epígrafes se dividen en tres categorías:
Dentro de cada categoría, existen varias opciones que debes considerar al escoger el adecuado. En caso de duda, siempre puedes consultar en Hacienda para estar seguro.
Además, si te dedicas a múltiples actividades que se encuentran dentro de diferentes IAE, tendrás que darte de alta en cada uno de ellos correspondientemente.
Una vez hayas completado tu alta en Hacienda, tendrás que decidir cómo deseas tributar. Existen tres opciones:
Sin embargo, en algunos epígrafes, solo es posible tributar de una manera específica, por lo que no tendrás la opción de elegir.
Es esencial tener en cuenta que la forma en que elijas tributar tendrá un gran impacto en tus obligaciones fiscales y, por lo tanto, en el funcionamiento de tu negocio. Por lo tanto, elegir la opción correcta es crucial para evitar problemas con Hacienda.
Cada IAE tiene su propia tarifa, que se publica en el BOE. Pero además de la tarifa, hay que tener en cuenta otros elementos para calcular la cantidad a pagar:
Teniendo en cuenta estos elementos, se calcula la cuota total que se deberá pagar a partir del 1 de enero y por todo el año. Es importante recordar que, aunque estés obligado a darte de alta en el IAE, es posible que no tengas que pagar nada.
El IAE es un impuesto directo que grava a autónomos y personas jurídicas por la actividad empresarial, profesional o artística que realizan dentro del territorio español. Si bien es cierto que todos están obligados a darse de alta en el IAE, existen excepciones que liberan a muchas pequeñas empresas de esta carga tributaria.
Además, es importante saber que para cada actividad a la que te dediques existe un epígrafe específico en el que debes darte de alta y que para cada IAE se aplica una tarifa diferente que se calcula en base a diversos elementos.
En definitiva, es necesario conocer bien el funcionamiento del IAE y sus obligaciones fiscales para poder cumplir con ellas adecuadamente y evitar posibles sanciones económicas. Por eso, si tienes duda en Asesorae estamos listos para ayudarte.