Si cuentas con una propiedad destinada al alquiler turístico o vacacional, es probable que utilices plataformas como Airbnb y otras similares para encontrar clientes. Estas plataformas tienen una sólida presencia en el mercado y son la primera opción a la que recurren los viajeros en busca de alojamiento.
Como arrendador, es importante que tengas en cuenta que el uso de estos servicios conlleva costos. Con el objetivo de facilitar la adecuada presentación de tus declaraciones fiscales, analizaremos cómo se gestionan los gastos deducibles relacionados con el alquiler en Airbnb.
Existen dos modalidades para llevar a cabo el alquiler turístico o vacacional, ya sea con o sin servicios asociados. En el primer escenario, los rendimientos generados se consideran ingresos de actividades económicas para efectos del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). En el segundo caso, se clasifican como rentas del capital inmobiliario y también están sujetas al IRPF.
En otras palabras, si posees una vivienda y la alquilas mediante Airbnb, estás obligado a declarar los beneficios. Sin embargo, la normativa contempla una serie de deducciones aplicables a estas sumas.
Sí, estos gastos son deducibles, pero surgen dos situaciones distintas.
En el caso de dedicarte al alquiler vacacional de forma particular, tributarás estos ingresos como rendimientos del capital inmobiliario. Por lo tanto, solo podrás descontar los gastos directamente vinculados a ese piso o casa.
Si te has registrado como autónomo para ejercer el alquiler turístico de manera profesional, las ganancias obtenidas se consideran rendimientos de actividades económicas. En este escenario, puedes deducir los gastos relacionados con el inmueble, así como todos los gastos afectos a tu actividad, como tus contribuciones a la Seguridad Social o los gastos derivados de emplear a alguien para ayudarte en la gestión de tu negocio.
Los gastos más relevantes que pueden deducirse tanto particulares como autónomos son aquellos directamente relacionados con el inmueble. Sin embargo, es crucial conservar la factura o justificante de los mismos durante al menos cuatro años. Esto permite acreditar ante Hacienda que dichos gastos fueron efectuados en el momento oportuno, en caso de que se lleve a cabo un procedimiento de control o inspección.
A continuación, detallamos siete gastos deducibles si destinaste tu vivienda al alquiler vacacional a través de Airbnb.
Conocer los gastos deducibles por alquiler en Airbnb es esencial para lograr ahorro fiscal en esta actividad y evitar pagos excesivos a Hacienda.
¿Tienes dudas sobre los gastos deducibles por alquiler Airbnb? Contacta con el equipo de profesionales de Asesorae y te las resolveremos a la mayor brevedad posible.