En el entorno actual de la industria financiera en España, donde cada instante es valioso, la celeridad en las transacciones se ha erigido como un desafío esencial para las empresas de hoy en día. En este contexto, surge un concepto que, a menudo pasa desapercibido, pero que puede desempeñar un papel fundamental en la optimización de la gestión del capital empresarial: el float financiero.
A continuación, te explicaremos en qué consiste, cómo se calcula y cuál es su relevancia en el ámbito de la tesorería de las empresas en la actualidad.
El float financiero hace referencia al período de tiempo transcurrido desde que una empresa emite un cheque o efectúa una operación financiera hasta que los fondos se retiran efectivamente de su cuenta bancaria. En este lapso, a pesar de que los recursos han sido comprometidos para saldar una deuda o llevar a cabo una transacción, aún permanecen en la cuenta de la empresa y pueden destinarse a otros propósitos.
En términos más sencillos, es el intervalo en el cual el dinero "flota" en la cuenta de la empresa antes de ser transferido al beneficiario. La duración de este período puede variar en función de diversos factores, como la eficacia del sistema bancario, las políticas de la empresa y las prácticas comerciales habituales.
El cálculo del float financiero se basa en un retraso medido en días y, en consecuencia, se encuentra determinado por dos fechas esenciales: la fecha contable y la fecha valor.
Habiendo establecido los conceptos de fecha valor y fecha contable, el cálculo del float financiero se efectúa de la siguiente manera:
Float financiero = Fecha valor - fecha contable
Este resultado puede expresarse en diversas unidades temporales, aunque la más común es en días, ya que este suele ser el período de tiempo en el que regularmente se concreta la liquidación efectiva de las transacciones.
El float financiero ostenta una importancia capital por diversas razones:
Frecuentemente, se produce confusión entre los términos float comercial y float financiero, aunque presentan notables diferencias. En este sentido, el float comercial hace referencia al lapso de tiempo que transcurre entre la entrega de un bien o servicio y la recepción del pago correspondiente. En otras palabras, se trata del período en el que una empresa ha proporcionado un valor pero aún no ha percibido la compensación monetaria por ello.
Por otro lado, el float financiero, como mencionamos previamente, se refiere al intervalo entre la emisión de un pago y la efectiva salida de fondos de la cuenta bancaria de la empresa. Mientras que el float comercial guarda relación con las transacciones comerciales y las prácticas de pago, el float financiero está vinculado a la gestión de la tesorería y a las operaciones bancarias.
La gestión de la tesorería en una empresa tiene como responsabilidad administrar sus recursos financieros de manera que se garantice siempre la disponibilidad de liquidez suficiente para cumplir con las obligaciones a corto plazo. En este contexto, el float financiero desempeña un papel fundamental:
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