Si estás pensando en montar una Sociedad Limitada (SL) en España, es clave saber que, aunque aún hay bastante papeleo, en los últimos años las normas se han ido flexibilizando para agilizar el proceso.
El propósito principal de estos cambios es que las empresas puedan empezar a funcionar cuanto antes y que a los emprendedores les resulte más sencillo dar el salto y poner en marcha su propio negocio.
Si quieres montar una SL en España, antes de comenzar con los trámites es fundamental cumplir con una serie de requisitos. A continuación, te explicamos los más importantes de forma sencilla:
Para constituir una SL, se exige un capital social mínimo de 3.000 euros. Sin embargo, gracias a la Ley Crea y Crece, ahora no es obligatorio ingresar toda esa cantidad desde el principio. Basta con aportar un euro en una cuenta bancaria a nombre de la empresa. Eso sí, el resto del capital deberá completarse con beneficios o aportaciones futuras. Además, este capital puede ser en efectivo o en bienes, como mobiliario o inmuebles.
Este documento, emitido por el Registro Mercantil Central, confirma que no existe otra empresa con el mismo nombre que el que quieres usar para tu SL. Es un paso obligatorio para asegurarte de que la denominación social está disponible.
Cada socio debe presentar un DNI o NIE en vigor. Si alguno de los socios es una empresa (persona jurídica), será necesario aportar el NIF correspondiente.
Una vez elegido el nombre y obtenida la certificación negativa, la SL deberá contar con una cuenta bancaria propia, donde se depositará el capital social. Para abrir esta cuenta, el banco te pedirá el certificado de denominación social expedido por el Registro Mercantil.
Una vez cumplidos todos los requisitos previos, llega el momento de formalizar la constitución de la empresa. A continuación, te explicamos los pasos que debes seguir:
Los estatutos son el conjunto de normas internas que regulan el funcionamiento de la empresa. En ellos se incluyen aspectos clave como:
Los socios pueden optar por redactarlos por su cuenta o utilizar un modelo estándar, pero lo más recomendable es contar con un abogado que los personalice según las necesidades de la empresa.
El siguiente paso es acudir a la notaría para firmar la escritura pública de constitución de la sociedad, un trámite obligatorio en el que deben estar presentes todos los socios.
Para ello, se necesita presentar:
Con la escritura ya firmada, el siguiente paso es solicitar el NIF provisional a través de la Sede Electrónica de Hacienda, cumplimentando el modelo 036.
Este trámite también implica:
Para completar la solicitud, hay que adjuntar la escritura pública firmada y el certificado de denominación social.
El notario suele encargarse de enviar la documentación al Registro Mercantil, donde se inscribirá la empresa. Este paso es fundamental, ya que otorga a la SL plena personalidad jurídica.
Si prefieres hacerlo por tu cuenta, puedes presentar los documentos directamente en el Registro Mercantil correspondiente. El proceso suele tardar un máximo de 15 días hábiles.
Una vez inscrita la sociedad en el Registro Mercantil, el último paso es solicitar el NIF definitivo en Hacienda. Este trámite solo se puede realizar cuando la empresa está legalmente constituida y ya cuenta con personalidad jurídica propia.
Sea como fuere, si necesitas ayuda sobre cómo crear una SL en España, no dudes en contactar con el magnífico equipo de profesionales de Asesorae.