Inicio
Blog
¿Cómo se contabilizan reservas en la distribución de beneficios?
Contrátanos
Tenemos diferentes planes para cada tipo de empresa. Haz click a continuación y ¡olvídate de todo el papeleo!
¡Vamos!

¿Cómo se contabilizan reservas en la distribución de beneficios?

October 17, 2024

El procedimiento contable completo resulta bastante complejo, especialmente en ciertos momentos del año fiscal. Uno de los momentos más delicados se presenta al finalizar el ejercicio.

Entender cómo contabilizar las reservas es uno de los aspectos fundamentales en la distribución de beneficios de la empresa.

¿Qué son las reservas?

Las reservas son cuentas que presentan saldo acreedor y se establecen para hacer frente a posibles contingencias que puedan surgir en la empresa. Pueden ser reservadas para pérdidas futuras o depreciación.

Además, las reservas de una empresa pueden considerarse como beneficios retenidos, una porción de las ganancias que se apartan para mantener una posición financiera sólida.

Normalmente se emplean para adquirir nuevos activos, saldar deudas pendientes o financiar expansiones, primas y dividendos.

Es posible que con estas definiciones no haya quedado claro si las reservas son activo o pasivo. En realidad, forman parte del patrimonio neto de la empresa, incluido dentro de su pasivo.

Tipos de reservas

A pesar de que todas las reservas están en el patrimonio neto, hay distintos tipos:

  • Reserva legal: está establecida por la Ley, específicamente por el artículo 274 del Real Decreto Legislativo 1/2010, de 2 de julio, texto refundido de la Ley de Sociedades de Capital. Debe representar al menos el 20% del capital social. Si este porcentaje no se alcanza, se debe destinar el 10% de los beneficios de cada ejercicio hasta llegar a dicho mínimo. Esta cantidad puede variar siempre y cuando se parta de ese mínimo. Por ejemplo, si una empresa obtiene beneficios de 65.000 euros en un ejercicio después de impuestos y no cumple con la reserva legal, deberá aportar 6.500 euros a esta reserva.
  • Reserva voluntaria: se crea con cargo a los beneficios de la empresa y se aporta la cantidad que el empresario o el grupo gestor deseen. Por lo general, una vez cubierta la reserva legal, las empresas destinan sus ganancias a reservas voluntarias.
  • Reservas especiales: en algunos casos, son obligatorias:some text
    • Reserva por capital amortizado: se constituye cuando se reduce el capital para reembolsar las aportaciones de los socios.
    • Reservas estatutarias: están definidas en los estatutos de la compañía y requieren acuerdo de los socios en ese documento. Los accionistas determinan qué porcentaje se destina a este tipo de reservas.
    • Reserva por fondo de comercio: esta reserva puede existir siempre que haya activos en el fondo de comercio.
    • Reserva por acciones: se genera por la adquisición de acciones de una sociedad dominante sobre otra.
  • Reserva por pérdidas y ganancias actuariales: sirve para cubrir las retribuciones del personal con beneficios definidos.
  • Reservas ocultas: también conocidas como internas, latentes o tácitas. Cuando su origen es intencional, se llaman ocultas, pero cuando se generan sin intención, se consideran tácitas. No aparecen en el balance de situación, pero influyen en él.

Entre dichos tipos de reservas, están las disponibles e indisponibles. Por ejemplo, las reservas por acciones son indisponibles, mientras que las reservas por capital amortizado son disponibles.

¿Cómo contabilizar reservas en la distribución de beneficios?

Al contabilizar las reservas en la distribución de beneficios, lo primero que debemos considerar son las obligaciones establecidas por la Ley y los estatutos de la sociedad.

En este sentido, es importante tener en cuenta los siguientes límites antes de distribuir los beneficios:

  • Dotar la Reserva Legal: conforme al artículo 274 del TRLSC, se debe destinar al menos el diez por ciento del beneficio del ejercicio a la reserva legal hasta alcanzar, como mínimo, el veinte por ciento del capital social.
  • Garantizar que el Patrimonio Neto sea igual o mayor que el Capital Social: es posible que una sociedad no cumpla con este requisito antes de la propuesta de distribución, pero sí lo cumpla como resultado de dicha propuesta.
  • Asegurar que las Reservas Disponibles sean iguales o superiores a los gastos de Investigación y Desarrollo.
  • Dotar una Reserva Indisponible equivalente al Fondo de Comercio.

Si se cumplen todos estos requisitos y se ajusta a lo estipulado por la legislación mercantil, especialmente en lo referente a dotar la reserva legal hasta alcanzar el 20% del capital, será competencia de la Junta General decidir si se compensan los resultados negativos de ejercicios anteriores o no. Sin embargo, si las pérdidas de ejercicios anteriores provocan que el patrimonio neto de la sociedad sea inferior al capital social, será obligatorio destinar los beneficios a compensar esas pérdidas.

El destino de los remanentes después de aplicar lo anterior dependerá de la decisión de la Junta General. Por lo general, se suelen destinar a dividendos para socios y accionistas o a la creación de reservas voluntarias, que posteriormente pueden distribuirse como dividendos o utilizarse para inversiones.

Si tienes dudas sobre cómo contabilizar reservas en la distribución de beneficios correctamente, contacta con el equipo de profesionales de Asesorae y te las resolveremos a la mayor brevedad posible.