El aumento de las demandas financieras en numerosos hogares ha propiciado que los adelantos de salario se conviertan en una elección en alza entre las empresas para proporcionar anticipos parciales o totales a sus trabajadores.
A continuación, explicaremos el propósito de estos adelantos salariales y, en particular, su registro contable según el Plan General Contable español.
Un anticipo de nómina es una opción financiera que algunas compañías ofrecen a sus empleados, permitiendo el pago anticipado de una parte del salario correspondiente al período de pago actual, pero aún no desembolsado dentro del ciclo de nómina regular.
Este adelanto representa una fracción del salario que el trabajador recibirá anticipadamente por diversas razones, como emergencias personales, gastos imprevistos u otras necesidades financieras urgentes.
En España, los adelantos de nómina son un derecho legal establecido en el artículo 29 del Estatuto de los Trabajadores, el cual garantiza a los empleados la posibilidad de solicitar un adelanto de su salario a la empresa empleadora. No obstante, las cantidades y condiciones específicas son determinadas por el convenio colectivo aplicable a cada empresa, aunque generalmente se concede hasta el 90% del salario acumulado y pendiente de pago en la fecha de la solicitud.
Las cuentas contables asociadas con los anticipos de nómina son las siguientes:
En caso de que los anticipos sean tratados como «préstamos» concedidos al personal, no se contabilizarán en esta cuenta, sino en la 544 (Créditos a corto plazo al personal) o en la 254 (Créditos a largo plazo al personal), dependiendo del plazo de vencimiento.
Si tienes dudas sobre cómo se contabiliza un anticipo de nómina, contacta con el equipo de profesionales de Asesorae y te las resolveremos a la mayor brevedad posible.